Ciudad de México.- Cerca de 150 comerciantes en vía pública cerrarón el sentido oriente de la calzada Ignacio Zaragoza, a unos 200 metros de la estación Acatitla de la línea A del metro.
Los comerciantes tenian sus puestos en la calle Luis G. Cervantes, de la cual fueron removidos cerca de 400 estructuras metálicas esta madrugada.
"Queremos trabajar", es la consigna de los incorformes, quienes solo habían dejado libres dos carriles que conectan con un puente que lleva al distribuidor vial La Concordia, pero los volvieron a cerrar.
Algunos manifestantes, menos de cinco, están embozados.
Los carriles que continúan por Zaragoza hacia la carretera México-Puebla estan cerrados.
BLINDAN NUEVO TEPITO
Luego del desmantelamiento de puestos en Luis G. Cervantes, conocida como Nuevo Tepito, granaderos formaron vallas en todos los accesos a la calle.
En tanto maquinaria pesada retira la carpeta asfáltica pues la delegación Iztapalapa hará una repavimentación de la zona.
Además de los puestos, fueron suspendidos por el invea ocho bares en esta misma calle.
Norberto Roa, uno de los comerciantes retirados dijo que hace tiempo se les había pedido que se retirarán.
Dijo que ellos se dedicaban a trabajar, sin embargo, la calle comenzó a volverse más peligrosa desde que abrieron los bares y se suscitarón riñas, incluso algún homicidio.
Los comerciantes tenian sus puestos en la calle Luis G. Cervantes, de la cual fueron removidos cerca de 400 estructuras metálicas esta madrugada.
"Queremos trabajar", es la consigna de los incorformes, quienes solo habían dejado libres dos carriles que conectan con un puente que lleva al distribuidor vial La Concordia, pero los volvieron a cerrar.
Algunos manifestantes, menos de cinco, están embozados.
Los carriles que continúan por Zaragoza hacia la carretera México-Puebla estan cerrados.
BLINDAN NUEVO TEPITO
Luego del desmantelamiento de puestos en Luis G. Cervantes, conocida como Nuevo Tepito, granaderos formaron vallas en todos los accesos a la calle.
En tanto maquinaria pesada retira la carpeta asfáltica pues la delegación Iztapalapa hará una repavimentación de la zona.
Además de los puestos, fueron suspendidos por el invea ocho bares en esta misma calle.
Norberto Roa, uno de los comerciantes retirados dijo que hace tiempo se les había pedido que se retirarán.
Dijo que ellos se dedicaban a trabajar, sin embargo, la calle comenzó a volverse más peligrosa desde que abrieron los bares y se suscitarón riñas, incluso algún homicidio.
El Universal
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